La cosmética
natural es la alternativa a los cosméticos convencionales que encontramos en
grandes cantidades en el mercado. La cosmética natural favorece a los
alérgicos, asmáticos, personas con problemas den la piel y a cualquier persona
que quiera cuidar su salud desechando productos cosméticos tóxicos.
Los cosméticos
naturales son una alternativa a los cosméticos convencionales, respetando el
entorno durante su proceso de elaboración, lo cual atrae a cada vez más
usuarios de la sociedad en la que vivimos, cada vez más concienciada con el
medio ambiente y el desarrollo sostenible de éste.
Aunque es
cierto que, sus consumidores, a menudo se encuentran con la dificultad de no
saber diferenciar los auténticos productos naturales o ecológicos de los que no
lo son.
En la Unión
Europea no existe ninguna norma o ley donde se especifique que productos
cosméticos podemos catalogar de naturales, pero otros organismos consideran
cosmética natural a aquellos productos que han sido elaborados a partir de
ingredientes de cultivo ecológico.
La mayoría de
los criterios utilizados por estos organismos similares, a continuación se
muestran los de BDIH (federación de industrias y empresas cosméticas alemanas
que en 1996 decidieron unirse para elaborar y regular unas pautas, criterios y
reglas para seleccionar así una cosmética que fuera natural):
1.
“Las materias primas deben proceder de
plantas y, siempre que sea posible, de cultivo ecológico certificado.
2. Los
productos no pueden estar testados en animales ni contener materias primas procedentes
de animales vertebrados.
3. Se
permite el uso de sales inorgánicas y materias primas obtenidas de minerales,
excepto las del punto 5.
4. Materias
primas de uso restringido: solo se permiten emulgentes y tensoactivos de origen
vegetal como aceites, grasas, lecitinas, ceras, etc.
5. Sustancias
prohibidas: colorantes sintéticos, fragancias sintéticas, siliconas, materias etoxiladas y
parafinas y otros productos derivados del petróleo.
6. Conservantes:
se permiten conservantes naturales como el ácido benzoico, ácido ascórbico,
ácido salicílico y alcohol bencílico.
7. No
se permiten las radiaciones, ni en la materia prima ni en los cosméticos ya
elaborados, para eliminar gérmenes o bacterias de los cosméticos
8. Los
fabricantes tienen que someter a sus productos al análisis de un laboratorio
independiente que revisa si cumplen los requisitos y les otorga el sello BDIH.”
Categorías
Ecocert, el
organismo que controla y certifica en 85 países del mundo, certifica que hay
dos tipos de productos cosméticos:
·
Cosmético
natural: tiene un
mínimo del 95% de ingredientes naturales, un máximo de 5% de productos de
síntesis y como mínimo el 5% del total de los ingredientes debe proceder de la
agricultura biológica, representando el 50% mínimo de ingredientes vegetales.
·
Cosmético
natural y ecológico:
tiene un mínimo de 95% de ingredientes naturales, un máximo de 5% de productos
de síntesis y como mínimo el 10% del total de los ingredientes debe proceder de
la agricultura biológica, representando un 95% mínimo de ingredientes
vegetales.
A través de nuestros sentidos podemos descubrir si un producto es
cosmética natural - Vista: si nos encontramos con productos de colores llamativos
podemos descartar que se haya elaborado con productos naturales.
- Olfato: no todas frutas poseen aceites esenciales, por lo tanto
los productos con aromas que no sean de cítricos como pomelo, naranja,
mandarina, bergamota, naranja, etc. no serán naturales.
- El precio: los productos naturales normalmente tienen
un precio alto ya que dependen de los cultivos, las temperaturas, etc.
Tipo
de consumidores
Los usuarios
de este tipo de cosméticos suelen ser:
·
Personas
que tienen la idea de que la piel está en contacto con muchos productos
químicos, como cremas y maquillajes, y buscan otros productos con menos
sustancias químicas.
·
Personas
con alergias a sustancias químicas y que reaccionan bien ante productos
orgánicos.
·
Personas
con un estilo de vida natural.
Biotecnología
cosmética
La
Biotecnología cosmética es una parte de la biotecnología dedicada en su mayoría
al cuidado estético de los seres humanos. Para ello, esta rama manipula
diferentes organismos mediante análisis de distinta índole, como biológicos y
químicos.
Se basa en
investigar productos naturales para obtener diferentes vitaminas y proteínas
con el fin de poderlas ocupar en el cuerpo humano.
Sus
aplicaciones más conocidas son las que se dedican al cuidado de la piel. Esta
disciplina busca contrarrestar los efectos que se producen en el cuerpo humano
debido a la contaminación. Además también busca equilibrar la falta de
hidratación en la piel y eliminar los signos de la edad provocados por un
inadecuado cuidado de la piel o por productos cosméticos.
¿Por
qué usar la cosmética natural?
-
Está
compuesta por ingredientes naturales, de origen vegetal y/o producción
ecológicas.
-
Ofrece
mejores resultados y es más efectiva.
-
Aunque
la cosmética natural es más cara porque su fabricación es más costosa, su
consumo a largo plazo es más económica ya que al estar más concentrado se
necesita aplicar menor cantidad.
-
Hidratan
las capas más profundas de la piel.
-
Hidratan
más y generan menos alergias.
-
Respetan el planeta. Preservan
los recursos naturales, no generan residuos químicos ni perjudiciales para el
medio ambiente. La cosmética natural está comprometida con aspectos como la
agricultura sostenible, la reducción energética y el envasado ecológico.
-
No testan en animales. Se prueban a través de pruebas dermatológicas en
personas voluntarias.
Ventajas
de la cosmética natural
Las ventajas
de la cosmética natural sobre la cosmética convencional la podemos
resumir en:
“-
No contiene aromas sintéticos, ni conservantes y perfumes artificiales.
-
Se adapta muy bien a nuestro tipo de piel por la mayor afinidad de sus
componentes con nuestra epidermis.
-
No utiliza componentes químicos derivados del petróleo, ni aditivos
artificiales.
-
Regenera, cuida y protege la piel con eficacia.
-
Tiene un efecto más suave, menos agresivo, que la cosmética convencional.
-
Por estar compuesta por productos naturales, estimulan la capacidad innata de
la piel para regenerarse.
-
No provoca reacciones alérgicas o efectos secundarios, salvo excepciones, ya
que no tiene conservantes ni colorantes de síntesis, como sí ocurre en la
cosmética convencional.
-
Las plantas utilizadas en estos productos cosméticos se han cultivado sin usar
pesticidas ni herbicidas químicos de ninguna clase.
-
Es muy adecuada para pieles sensibles ó reacciones alérgicas por
hipersensibilidad a algún compuesto químico.
-
La cosmética ecológica está sometida a unos criterios y controles estrictos de
calidad y de seguridad.
-
Como sus compuestos son todos sustancias naturales, si se ingiere de forma
accidental, como puede ocurrir con los lápices de labios, no supone ningún
riesgo de intoxicación.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario